Una reestructuración es una acción de gestión corporativa que requiere mucha atención para poder hacerla efectiva. Existen varios motivos del porqué se da, y basándose en ello, hemos recopilado una serie de consejos que te ayudarán a definirla mejor y a aplicarla en tu propia organización. ¿Estamos preparados? ¡Empecemos!
¿Qué es la reestructuración de una empresa?
Es un término utilizado en la gestión corporativa y se refiere a las siguientes acciones:
- El cambio de estructura organizacional:
Implica cambiar un jefe de un grupo de trabajo, reasignar recursos de otros sectores, entre otros.
- El cambio de estructura financiera:
Implica la venta de activos, refinanciamientos de deudas a tasas de interés más bajas, e incluso, la presentación de quiebras.
¿Por qué se da una reestructuración?
Si bien existen múltiples razones por las cuales puede suceder una, las principales suelen ser:
- Por un mal funcionamiento:
Es decir, un incumplimiento de KPI, ineficiencia de desempeño de colaboradores o labores esenciales no cubiertas por ningún puesto.
- Cuando hay una fusión o alguien adquirió la organización.
- Cuando un colaborador clave se retira de la empresa, propiciando el cuestionamiento de la estructura organizacional.
- Si deseas dar nuevas oportunidades como el lanzamiento de un producto nuevo o la captación de un nuevo mercado.
- Si hay cambios en las necesidades de los clientes.
- Cuando los gerentes tienen demasiados subordinados.
No hay que sorprendernos cuando una empresa lleve una reestructuración de un departamento en específico. Esto puede deberse a que se ha identificado problemas o ineficiencias. Sin embargo, hay que comprender que si proseguimos con ese accionar, las otras áreas también sentirán el cambio.
Consejos para reestructurar una empresa o departamento
Identifica tu estrategia de negocio
Si no sabemos lo que la gerencia quiere lograr con la reorganización, será un gran problema cumplirla con eficiencia o inclusive, medirla. Se aconseja definir una estrategia de negocio que aplicarás para cumplir con el objetivo.
Determina las fortalezas y debilidades en la estructura organizacional actual
¿Qué parte de tu estructura organizacional actual no cumple con los objetivos que tienes en mente? ¿Sabes qué partes funcionan bien? Para ayudarte, es importante que crees un organigrama para obtener una perspectiva amplia de cómo está estructurada la empresa.
Identifica cómo se verán afectadas las personas de todas las áreas. Habla con tus colaboradores sobre lo que no funciona y lo que debe seguir como está. De nuestra decisión dependerá aplicar cambios.
Evalúa opciones y diseña una nueva estructura
Reúne todas las opiniones de los colaboradores, de las partes clave interesadas y considera todos los roles laborales existentes. Con ello en mente sabrás que es hora de crear un nuevo modelo de organización.
El primer modelo que crees no es necesario considerarlo definitivo. Este puede ser un borrador, pero deberá incluir:
- Las líneas verticales y horizontales de autoridad.
- La indicación de quién tomará decisiones formales dentro de los departamentos.
- Los atributos de los empleados, incluidas habilidades y experiencia.
- La definición y distribución de roles en toda la organización y las relaciones entre ellos.
Procura reconocer los pros y contras de los diferentes tipos de estructuras organizacionales, como la jerárquica, horizontal, matricial, etc. Una gran ayuda es la aplicación de un organigrama previamente mencionado.
Informa la reorganización
¿Tienes todo preparado? ¡No olvides comunicarlo! La información tiene que ser transparente y detallada, especificando las responsabilidades de cada rol. Utiliza el organigrama para mostrar el cambio.
Procura no sorprender a los colaboradores con la repentina reorganización. En caso tengas gerentes o puestos con subordinados, tienes la posibilidad de comunicarte con ellos primero para que puedan responder preguntas y ayudar con el cambio.
Inicia pero realiza ajustes
El proceso puede empezar. Dale tiempo a tus colaboradores para adaptarse y evaluar los efectos del cambio. Si la estructura no cumple aún con la meta planteada, nuevos ajustes deberán ser realizados.
¿Qué te pareció este artículo? ¿Hay otros datos que te interesaría saber? Coméntanoslo en una reunión mientras planeamos la reorganización de tu negocio. ¡Te invitamos a contactarnos por nuestra Página Web!